A partir del próximo mes de febrero todos los comercios habilitados para vender autopartes deberán estar escritos en el RUDAC, el Registro Único de Desarmaderos de Automotores y Actividades Conexas, y todas y cada una de las piezas deberán poseer la oblea identificatoria para poder seguir comerciando legalmente.
Sin dudas esta determinación busca frenar el mercado negro de autopartes.
Recordemos que en nuestro país el robo de automotores es un grave problema.
Entre fines de 2001 y principio de 2002 esta actividad alcanzó cifras récord cuando se dispararon los precios de los repuestos y más aún si se trataba de un coche importado.
En autos que hace más de 12 años dejaron de fabricarse se complica conseguir repuestos originales por lo que sus propietarios caen indefectiblemente en los desarmaderos.
Para quienes infrinjan la ley se preveen multas de hasta $200.000 o la inhabilitación por hasta 3 años.
vía clarin
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